En Santiago de Cuba, provincia con difícil situación epidemiológica por la COVID-19, se reordenan los servicios médicos con el fin de disponer de mayor capacidad de aislamiento para enfermos y sospechosos, y garantizar la atención óptima de los mismos.
La estrategia de reorganización comprende la estratificación de las personas en dependencia del riesgo, en aras de ofrecer cuidados específicos a quienes presentan síntomas sugestivos y comorbilidades, más proclives a las complicaciones del padecimiento.
Según trascendió en el Consejo de Defensa Provincial (CDP), los positivos asintomáticos se internarán en instituciones habilitadas en razón de la actual contingencia sanitaria, mientras se destinan nuevas capacidades en las salas de terapia para quienes lo requieran.
Con el objetivo de optimizar los cuidados a sospechosos y contagiados en edad pediátrica, se proyecta la ampliación de la disponibilidad de camas para infantes en esas categorías y sus acompañantes en dos centros fundamentalmente: el hospital Juan de la Cruz Maceira, conocido como la Ondi, y la facultad dos de Medicina, explicó el órgano de dirección.
Este reordenamiento asistencial alcanza a los nueve municipios del territorio, todos con presencia de la COVID-19, y cuenta con la totalidad del personal médico, paramédico y auxiliar, así como los aseguramientos logísticos necesarios para ofrecer atención de calidad.
También se mantiene el aislamiento en hogares de ancianos, centros psicopedagógicos y el hospital psiquiátrico, el cierre de las casas de abuelos y el resguardo de las personas con conducta deambulante en sitios seguros.
De acuerdo con la fase uno de recuperación pospandemia, en la que se encuentra la provincia, se suspendió la visita a pacientes en hospitales y la actividad quirúrgica electiva, aunque prosiguen las de urgencia y pacientes oncológicos.
Con la incorporación de estomatólogos, otros trabajadores de la salud y estudiantes de Ciencias Médicas, de gran aporte en la primera etapa de lucha contra la dolencia, se intensifica la vigilancia epidemiológica mediante la pesquisa activa diaria en las comunidades.
Los servicios estomatológicos asumirán solo las urgencias y los grupos priorizados.
El CDP, con la asesoría de las autoridades sanitarias, indicó la segregación de las consultas externas a las áreas de salud sin riesgo de propagación del coronavirus SARS-CoV-2 e instó a incrementar las medidas higiénicas en todos los espacios.
Santiago de Cuba, tercera provincia con la mayor tasa de incidencia de la COVID-19 hoy en el archipiélago, reacomoda los servicios primarios y secundarios de salud para enfrentar, de la mejor manera, cualquier escenario de la pandemia.
Texto: Beatriz Vaillant Rodríguez|Fotos: Carlos Johann González
