Díaz-Canel conoció que las cuatro unidades de la planta se encuentran en funcionamiento con una disponibilidad de 230 megawatts (Mw), aunque persisten las limitaciones de la carga, explicadas en su visita anterior a la entidad el 17 de junio.
Según dijo, en octubre actuarán sobre la máquina cuatro y dejarán la seis, la de peores condiciones en la caldera, para el primer trimestre de 2023, mientras la cinco entrega hoy al SEN 90 Mw de manera estable.
Refirió la situación con la producción de agua desmineralizada, afectación que se solucionará con el completamiento de recursos en septiembre y ello propiciará estabilidad a los bloques en este sentido.
Durante su recorrido por el centro, Díaz-Canel dialogó con sus trabajadores, destacó el papel de los jóvenes en las tareas decisivas y encomendó a la dirección de la entidad propiciarle cursos de posgrado, capacitación e investigaciones, porque en sus manos están las posibilidades de innovaciones para el futuro de esta central, que tuvo su primera unidad sincronizada al SEN el 20 de febrero de 1966 y que por lo tanto fue una de las primeras construidas por la Revolución.
El jefe de Estado reverenció, asimismo, la heroicidad de esos hombres y mujeres por no reparar en horarios y laborar con denuedo a elevadas temperaturas para reducir en el menor tiempo posible las afectaciones a la población de la cual también forman parte.
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