Cuba sufre las consecuencias del recrudecimiento del bloqueo impuesto por los Estados Unidos, pero el gobierno cubano con su carácter humanista, sigue apostando por el bienestar del pueblo, que ha quedado más que reafirmado en tiempos de la COVID-19, comprometido con la salud de la población, de ahí su consagración y esfuerzos en consolidar y ampliar el sistema sanitario en el país.

Santiago no está exenta de ese quehacer, que se puso de manifiesto en su desvelo por controlar la pandemia. Las máximas autoridades del territorio, junto a cuadros y dirigentes, y la colaboración y disciplina de todos contribuyeron a que la provincia rápidamente fuera disminuyendo los casos hasta reportar cero pacientes infectados, sospechosos y asintomáticos.

Mientras eso sucedía, en las inmediaciones de la carretera que conduce al consejo popular de El Caney, en el lugar conocido como Veguita, se remodeló un inmueble que ocupaba una carpintería, y devino en un Hospital de Campaña.

Sierra Maestra, visitó la instalación donde prima la belleza, el orden, con una jardinería muy bien diseñada con atrayentes plantas ornamentales donde prevalecen las rosas, y como si fuera poco completan el entorno, frondosas matas de mango.

Ya en el lugar conversamos con el inversionista Ángel Ruiz Padilla, quien sentenció que con un monto aproximado de más de cuatro millones de pesos se acometieron más de 12 objetos de obra en unos 3 mil 300 metros cuadrados de área total; además señaló que poseen una cisterna donde se pueden almacenar alrededor de 9 000 galones del líquido.

Adentrándonos en el centro asistencial, el joven galeno Héctor Alexis Urquiza Cueto, quien se desempeña como responsable del centro asistencial, nos hizo así una imagen panorámica de los servicios que posee el nuevo Hospital de Campaña.

El doctor Urquiza Cueto, dijo: “El centro cuenta con tres salas, que incluye, además un servicio de pediatría, un laboratorio, farmacia, cocina comedor, central de esterilización, un área socio-administrativa, cocina-comedor, almacenes de víveres y misceláneas.

“La misión que tenemos es la atención a pacientes con patologías infectocontagiosas que se puedan presentar en el territorio. El hospital como expresó el inversionista tienen 300 camas, divididos en servicio de adultos, hombres y mujeres, y el de pediatría, también divididos de igual forma.

“La sala para los niños, es nuestro orgullo”, sentenció el doctor Héctor, lo que es muy cierto, los 'peques' que lleguen al lugar, desgraciadamente con una afección de salud, van a encontrar un lugar en el que a pesar de su dolencia, encontrarán a Elpidio Valdés, y a María Silvia dándoles la bienvenida y pronta recuperación, junto a Cecilín y Coti, Fernanda, ....

Las amplias salas de ingresos están dotadas de confortables literas con colchones de espuma y sus respectivos ventiladores a todo lo largo del recinto, y televisores de pantalla plana en todos los cubículos, mientras que en el área dedicada a los pacientes pediátricos hay cómodos balances para las madres acompañantes.

En la zona dedicada a la lavandería, se aprecian unas cinco flamantes lavadoras, mientras que en el comedor prima el buen gusto, lo que se complementa con lo expresado por varios trabajadores, quienes afirmaron que la comida está muy bien elaborada.

“Tenemos un personal muy comprometido con la protección de la salud del pueblo, la mayoría estuvimos enfrentando la COVID-19 en los centros habilitados para su tratamiento, experiencia que se suma a nuestra labor en el tratamiento del dengue, y estamos listos para brindar lo mejor de sí donde se nos indique” sentenció el galeno.

Fuente: Periódico Sierra Maestra

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