Como parte de los acuerdos del recién concluido XII Congreso de la Unión de Jóvenes Comunistas, se realizó un intercambio entre los delegados, las autoridades políticas y gubernamentales y representantes de la juventud santiaguera, para debatir sobre los desafíos actuales.
Con énfasis en las políticas ideológica y la socioeconómica, que buscan acompañar y facilitar la participación joven en la toma de decisiones con el fin de crear soluciones desde el territorio, se socializaron los desafíos de los municipios y la provincia en el próximo quinquenio.
El énfasis está en la atención a la niñez y la juventud, la innovación como respuesta a las limitaciones tecnológicas, la inserción en la producción de alimentos desde sus esferas, la promoción de la continuidad de estudio y la inserción laboral, y la transformación de las localidades al punto que la emigración no sea la meta; que el proyecto país se alinee con los proyectos personal de quienes son el futuro de Cuba.
El encuentro sirvió para reconocer a la Universidad de Oriente y a la escuela Amistad Cuba Vietnam, centros que fueron abanderados por su labor durante el Congreso.
La cita dejó claro que Santiago de Cuba confía en su juventud, al margen de las carencias y limitaciones, o tal vez porque incluso con ellas, hay muchos que siguen eligiendo construir en aquí, su felicidad.
